Ciudadano del mundo

“Yo siempre quiero ser primero en todo. Me pone muy contento ser el presidente de la entidad que fiscalizará la primera pelea de boxeo en esta hermosa tierra, como fuimos los primeros en montar un título del mundo hace un par de semanas con Juan Manuel Marquez en la nueva arena de México”, con estas palabras, Francisco Valcarcel, un abogado puertorriqueño de 62 años que desde 1995 dirige la OMB. Fue reelecto en cuatro ocasiones y se prepara para festejar en octubre los jóvenes 25 años del ente que hizo fuerte en Europa y desde alli comenzó a extender sus dominios.

“El mundo del boxeo es muy discriminatorio. Si eres una cara nueva ni te saludan. Es como en el ejército vales por los galones que tienes. Nosotros empezamos de muy abajo, nos decian que eramos europeos porque teniamos boxeadores ingleses y alemanes. En la OMB surgieron Naseem Hamed, Chris Eubank, Dariusz Michalczewski y los hermanos Klitschko. Todo nos costo el doble porque no podiamos entrar en Estados Unidos y en México, pero hicimos un trabajo hormiga y hoy puedo decirte que tenemos 65 federaciones en todo el mundo”, explico quien es un eximio jugador de golf y comparte jornadas por los green de distintas canchas junto a Oscar De La Hoya. “Después de hacer firmes compromisos con los promotores fuertes de Europa, decidimos buscar a los mejores boxeadores de las pequeñas ligas y por medio de títulos regionales fuimos integrandolos a nuestro proyecto. Asi apareció Pacquiao, igual que Cotto. Nos aliamos con la gente del Forum, en Los Angeles y conseguimos ingresar a Mexico y Los Estados Unidos. Hoy tenemos un título norteamericano, cosa que hace quince años era impensable”, afirmó quien ayer departió amablemente con cuanto sanjuanino lo saludó y que presidió la lectura de reglamento y la elección de guantes por parte de los representantes de los protagonistas de la pelea por el título del mundo.

“Al Negro Rivero (Osvaldo Rivero) lo conocí en Francia y con el entramos a la Argentina, uno de los paises mas fuertes en boxeo. Narvaez es uno de nuestros campeones emblema en esta parte del continente”, confio quien ha logrado ingresar con el boxeo a China. “Es una cosa curiosa, porque por su sistema de gobierno a sus mejores amateurs no los dejan pasar al profesionalismo, pero el boxeo ha prendido y se impondra. Cada vez asiste mas gente a las veladas”, explicó quien prometió volver a San Juan cuando retorne a la Argentina porque le interesa conocer el Valle de la Luna. “Si es Patrimonio de la Humanidad, debo visitarlos”, conto este afable ciudadano del mundo.

 

Periodico “Diario de Cuyo” (21 de abril de 2012)